Con  la poesía
pobrecita
ya no nos queda mucho
tiene las tetas secas
ya le dijimos todo.
Despotricamos
y hasta nos hicimos pasar
por gente honesta y agradable
enternecida, enamorada
cuando en realidad
solo queríamos expulsar un poco de energía
para afuera
porque por dentro se nos hace una trombosis
de palabras que no podemos decir
y después nos tenemos que amputar
un pedazo de sentimiento atragantado.
Que pedazos de miércoles fuimos
Desagradecidos y desgraciadas
Y oportunistes
Usurpadores
Y ¡qué bien!
Y bueno, ya está
Qué la culpa arda
Acá
Acá yo
Sola con el monitor Samsung
Brillando para mis ojos
Grandes e irritados
Configuro
En cada letra que voy tocando
En cada letra que voy dejando
Mi renuncia a pretender ser algo a través
De las palabras
Renuncia que solo le importa
Al organismo que yo gestiono
Osea a mi persona
Es que hablamos tanto Miguel
Somos una maquinita tacataca
Imparable
Tenemos una plataforma de sonidos y sentidos
Que por suerte
Pero por defecto a veces se nos olvidan los pies
Y solo sabemos hablar
Ya ni caminamos o no sabemos si caminamos
Hablamos de caminar
Escribimos sobre caminatas
Largas reflexivas, con retórica.
Yo creo en el fin del mundo como un evento constante
Todos los días se me termina una pequeña porción de mundo
Que represento
Creo en los finales tanto como
En los principios
Y  veces siento que uno es al otro
El universo paralelo de si mismo.
Yo escribo un poema
Proclamándome muerta en la poesía
Carente de cantares
Me muero en mi mismísima contradicción
Yo estoy acostumbrada
Hasta mi perro que me mira
Sabe que esto que hago
Es parte de mi y no le sorprende
Pero yo me sobresalto con
Mi acostumbramiento
Por eso termino
Acabo
Ya.



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